JAGUAR

Panthera onca

Clasificación:
Reino Animalia; Filo Chordata; Subfilo Vertebrata; Clase Mammalia; Subclase Theria; Infraclase Placentalia; Orden Carnivora; Suborden Feliformia; Familia Felidae; Subfamilia Pantherinae; Género Panthera; Especie P. onca.

Nombres
El nombre “jaguar”, o yaguar, procede supuestamente de la palabra guaraní yaguá, que significa fiera. Sin embargo, ante la presencia de los feroces perros de combate traídos por los europeos, el término se comenzó a aplicar a cualquier perro, quedando redenominado como yaguá-eté, que significa fiera verdadera. De allí surge también la denominación “jaguareté”. En México, en náhuatl o azteca, se denomina ocelotl; y en maya se lo llama balam. En quechua se le dice uturuncu o unqa. En mapuche se lo denomina nahuel. En Brasil se le da el nombre de “onza”, del portugués onça; en cambio, en gran parte de Hispanoamérica, desde los tiempos de los conquistadores españoles, es común llamarlo “tigre” o tigre americano.

Características
El jaguar es el felino más grande de América. Mide 1,50 m de longitud, de los cuales más de 80 cm corresponden a la cola, puede llegar a medir 1 m de alzada, y pesar entre 70 y 130 kg. Es corpulento, con una cabeza robusta y extremidades fuerte, musculosas y terminadas en afiladas garras. Posee la estructura mandibular más poderosa de todos los felinos, cuya fortaleza le permite atravesar, por efecto palanca, el caparazón de una tortuga o de un armadillo, y una apertura de fauces que puede alcanzar un ángulo de 70º.
Como los otros felinos del género Panthera, el hueso hioides del jaguar está unido a la laringe mediante ligamentos imperfectamente osificados lo cual le permiten rugir. Siendo, de esta manera, el único felino americano con esta capacidad.
El pelo es corto, espeso, suave y brillante. El color es generalmente amarillo-anaranjado, presentando a su vez zonas blancas en la región ventral, en la extremidad del hocico y sobre la cara interna de los pabellones auriculares, y aparece jaspeado en todo el cuerpo, con manchas negras, pequeñas y redondas en la cabeza, en el cuello y las extremidades, y con manchas más grandes, en el resto del cuerpo, con formas anilladas o en rosetas y en cuyo interior se encuentran uno o más puntos. La cola es anillada. Rara vez puede encontrarse un jaguar con una condición conocida como melanismo, que lo hace ver completamente negro, aunque las manchas permanecen visibles si se observa detenidamente.

Comportamiento
Aunque se asemeja en apariencia al leopardo, su papel ecológico y comportamiento son más acordes a los del tigre, puesto que son predominantemente terrestres y carecen de depredadores o competidores naturales, al ser el resto de los felinos americanos significativamente más pequeños.
Su hábitat varía desde la selva tropical al campo abierto, pero muy rara vez es visto en zonas montañosas, en donde si predomina el puma. Conocido por su habilidad para nadar y trepar, generalmente prefiere vivir cerca de ríos, pantanos y bosques frondosos con vegetación espesa para acechar a sus presas.
El jaguar es un cazador solitario y focal realizando para ello grandes marchas durante una jornada (incluyendo la noche) y no se relaciona con otros de su especie más allá de la época de apareamiento. Suele establecer un amplio territorio, el cual puede medir entre 25 y 150 km2, dependiendo de la disponibilidad de presas; y este es marcado a través de vocalizaciones, arañazos en los árboles, orina y heces. Es un depredador de emboscadas, y generalmente caza presas grandes como venados, tapires, carpinchos o pecaríes, aunque suele atrapar cualquier animal, desde ranas y ratones a aves, peces y animales domésticos. Inclusive puede cazar cocodrilos, tortugas y enormes serpientes. Por otra parte, y a diferencia de otros felinos, son excelentes nadadores y están también adaptados para la caza de presas acuáticas desde la superficie. Por lo general no ataca al hombre.
No hay una época reproductiva, sino que pueden reproducirse en cualquier época del año. Sin embargo, la mayoría de los apareamientos son entre agosto y septiembre, para que los nacimientos coincidan con la época de lluvias, cuando las presas son más numerosas. El celo de la hembra dura 6-17 días de un ciclo de 37 días, y es indicada a través de marcas odoríferas urinarias y vocalizaciones. Durante el cortejo, macho y hembra cubren un territorio más amplio del habitual. La pareja se separa después del coito y la hembra se encarga del cuidado de los cachorros. La hembra dan a luz, luego de una gestación de 92-115 días, camadas promedios de 2 a 3 cachorros. Son amamantados por 3-4 meses, pero permanecen en la madriguera y son alimentados por la madre hasta los 5-6 meses de edad. A partir de ese momento, los cachorros siguen a la madre en la cacería, al principio permaneciendo escondidos en cualquier arbusto, y después compartiendo con ella las emboscadas. Los jóvenes permanecen con la madre por un tiempo largo, de hasta 2 años, antes de comenzar a establecer un territorio propio. La madurez sexual es alcanzada aproximadamente a los 2 años de edad en la hembra y a los 3 años de edad en el macho. Un jaguar puede vivir aproximadamente 22 años.

Distribución
Hasta la llegada de los europeos a América, el área de distribución del jaguar era mucho mayor que en la actualidad. Su límite septentrional se encontraba en América del Norte, hacia el paralelo 35º N, al sur de los actuales estados de California, Nuevo México y Texas de Estados Unidos; en cambio, su límite meridional se encontraba en América del Sur, hacia el paralelo 40º S, en la actual provincia de Chubut en Argentina. Desde esa época hasta la actualidad, el jaguar ha sido exterminado por el hombre fuera de las áreas selváticas o inaccesibles.
En Argentina, el jaguar actualmente se encuentra en la Yunga Salteña, en el Bosque Chaqueño y en la Selva Misionera.
El 15 de agosto de 2001, en Argentina se sancionó la Ley 25.463, que declara al jaguar como Monumento Natural en Argentina, debido a ser una de las especies en peligro de extinción en este país.

Estado de conservaciónEl jaguar es un animal en peligro de extinción, debido a la pérdida de su hábitat por la deforestación y a la caza ilegal. Sin embargo, en la actualidad está clasificado como casi amenazado de extinción (NT).

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